La moda de usar pieles
Sin dudas que las pieles a la hora de escogerlas para nuestro vestuario resulta tentador y muy elegante pero a la costa del sufrimiento de animales indefensos que no pueden tener una voz propia en nuestro mundo una de las peores cosas que le puede pasar a un animal es que se le produzca sufrimiento de forma intencionada y hasta morbosa de parte del ser humano.
Durante décadas la industria de la moda nos ha impuesto el concepto del lujo y la elegancia con la imagen de una sofisticada mujer envuelta en un lujoso abrigo de piel. Anualmente la industria peletera causa la muerte en el mundo a más de 140 millones de animales silvestres. Cuarenta millones de estos animales son criados y matados en granjas y los 20 millones restantes son cazados de la naturaleza, utilizando generalmente trampas no selectivas que a su vez producen la muerte de otros 80 millones de animales no útiles para la peletería. Cada prenda elaborada con piel de animales silvestres esconde la muerte innecesaria de muchos animales. La peletería no es sólo sinónimo de muerte, también lo es de sufrimiento. En el caso de animales en libertad su muerte se produce especialmente mediante la utilización de trampas, tales como cepos. Estos métodos no causan la muerte del animal de forma rápida, sino que alargan el sufrimiento. La muerte termina produciéndose tras un largo tiempo de agonía. En el caso de las granjas, la crueldad se inicia desde el momento que se obliga a vivir a los animales en reducidas cajas junto a cientos de animales de su misma especie, con grandes niveles de "stress" psicológico estas granjas no tienen en cuenta sus necesidades psicológicas y sus necesidades básicas , causando en los animales estereotipos, movimientos anormales y apatías incumpliendo la Convención Europea para la protección de los animales de granja. Los métodos utilizados para matar a estos animales van desde el gaseado con monóxido o dióxido de carbono, la dislocación del cuello, la electrocución, hasta el desangrado y una de las mas dolorosas es cuando le arrancan la piel vivos como muestran las siguientes fotos.
Sin dudas que las pieles a la hora de escogerlas para nuestro vestuario resulta tentador y muy elegante pero a la costa del sufrimiento de animales indefensos que no pueden tener una voz propia en nuestro mundo una de las peores cosas que le puede pasar a un animal es que se le produzca sufrimiento de forma intencionada y hasta morbosa de parte del ser humano.
Durante décadas la industria de la moda nos ha impuesto el concepto del lujo y la elegancia con la imagen de una sofisticada mujer envuelta en un lujoso abrigo de piel. Anualmente la industria peletera causa la muerte en el mundo a más de 140 millones de animales silvestres. Cuarenta millones de estos animales son criados y matados en granjas y los 20 millones restantes son cazados de la naturaleza, utilizando generalmente trampas no selectivas que a su vez producen la muerte de otros 80 millones de animales no útiles para la peletería. Cada prenda elaborada con piel de animales silvestres esconde la muerte innecesaria de muchos animales. La peletería no es sólo sinónimo de muerte, también lo es de sufrimiento. En el caso de animales en libertad su muerte se produce especialmente mediante la utilización de trampas, tales como cepos. Estos métodos no causan la muerte del animal de forma rápida, sino que alargan el sufrimiento. La muerte termina produciéndose tras un largo tiempo de agonía. En el caso de las granjas, la crueldad se inicia desde el momento que se obliga a vivir a los animales en reducidas cajas junto a cientos de animales de su misma especie, con grandes niveles de "stress" psicológico estas granjas no tienen en cuenta sus necesidades psicológicas y sus necesidades básicas , causando en los animales estereotipos, movimientos anormales y apatías incumpliendo la Convención Europea para la protección de los animales de granja. Los métodos utilizados para matar a estos animales van desde el gaseado con monóxido o dióxido de carbono, la dislocación del cuello, la electrocución, hasta el desangrado y una de las mas dolorosas es cuando le arrancan la piel vivos como muestran las siguientes fotos.
La muerte anual de 140 millones de animales silvestres, para la confección de productos de lujo e innecesarios, es un evidente derroche de nuestro recurso de la fauna. Pero además la existencia de las granjas peleteras supone también un derroche energético y de alimentos, estas generan grandes cantidades de residuos orgánicos de los ganados en los establos, los alimentos y de los cadáveres despellejados, que favorecen y desarrollan la proliferación de ratas y microorganismos patógenos, y la eutrofización de las aguas. Además, en los procesos de curtición de las pieles se emplean metales pesados que se vierten en las aguas industriales, envenenando los ecosistemas acuáticos. Para hacer un sólo abrigo (dependiendo de la especie y del tamaño de la prenda) se sacrifican muchos animales.
La problemática es la inconcebible crueldad con que se lleva a cabo la muerte de estos animales y la forma indiscriminada que se le da a la cacería de estos. La auténtica belleza no se puede lograr mediante el sufrimiento, y la crueldad nunca puede ser elegante.
Para que quede mas claro la crueldad que se utiliza vea el siguiente video:
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